La historia oculta del Ford Mustang

Hola!

Bueno, se llegó el viernes

Hoy vamos a hablar de uno de esos carros que no necesita presentación.

El Ford Mustang.

Lo ves y sabes lo que es.

Pero lo que probablemente no sabías es que este modelo estuvo a punto de no existir.

Sí, así como lo lees.

A inicios de los años 60, Ford tenía un problema.
Sus autos eran grandes, familiares

… y bueno, muy aburridos para los jóvenes.

Mientras tanto, la competencia ya comenzaba a coquetear con diseños más pequeños y deportivos.

Y luego llegó alguien llamado Lee Iacocca, uno de los ejecutivos más valientes de la industria, planteó una muy buena idea.

Crear un carro con…

• Look deportivo.

• Accesible.

• Para cuatro personas.

• Con mucho estilo.

Un auto pensado para una nueva generación.

La respuesta dentro de la empresa fue un rotundo “no”.
Muy arriesgado, muy diferente y muy complicado.

Pero Iacocca no se dio por vencido.
Insistió, buscando aliados.

Empujando el proyecto como si su carrera dependiera de ello (y en parte, así era).

Hasta que logró lo impensable

Convenció a la junta directiva de apostar por un modelo completamente nuevo, que se salía del molde.

Así fue como nació el Mustang.

El día de su lanzamiento, en 1964, Ford esperaba vender unas 100 mil unidades en el primer año.

¿Sabes cuántas vendieron en solo 3 meses?

Más de 400 mil.

Fue un éxito tan grande que los concesionarios no daban abasto.

Había gente durmiendo afuera para ser los primeros en comprar uno.

Una locura.

Y todo eso, porque alguien creyó en una idea que casi todos querían desechar.

Hoy, décadas después, el Mustang sigue siendo sinónimo de libertad, rebeldía y pasión por los autos.

Pero si no fuera por esa terquedad de una persona, probablemente no existiría.

Nos leemos la próxima semana, cuídate mucho y feliz finde 🚗🔥

PD: Y si esta historia te gustó, reenvíasela a alguien que ame los clásicos, seguro te lo va a agradecer.

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